¿Es segura la acupuntura? ¿Tiene efectos secundarios?
Llevada a cabo por personal cualificado, la acupuntura es una técnica segura, pero como cualquier procedimiento invasivo puede tener efectos secundarios, que son en general, leves y transitorios.
A continuación se enumeran algunos de los efectos secundarios más frecuentes:
- Durante la sesión es normal una sensación de pesadez, ardor u hormigueo local. Es habitual también un estado de relajación o incluso de somnolencia después del tratamiento. No es negativo. En estos casos se recomienda no realizar actividades peligrosas inmediatamente después de la sesión.
- En ocasiones se observa un empeoramiento transitorio de los síntomas, que suele durar 1 o 2 días y que no representa un fracaso del tratamiento, sino que precede al inicio de la mejora. No debe alarmar pues es un signo de buen pronóstico con respecto a la eficacia del tratamiento.
- Entre las complicaciones y efectos secundarios leves se encuentran el mareo / síndrome vagal, dolor local y pequeños hematomas. Las complicaciones graves son altamente infrecuentes y se pueden evitar con la utilización de material adecuado y un buen conocimiento de la anatomía.
¿La acupuntura tiene contraindicaciones?
Si bien no existen contraindicaciones absolutas, es importante advertir a su médico acerca de antecedentes de desmayos o convulsiones, trastornos de la coagulación o tratamientos con fármacos antiagregantes/anticoagulantes. Asimismo, también debe informar si lleva prótesis cardíacas, prótesis articulares, marcapasos u otros dispositivos eléctricos.
Es importante que comunique si está embarazada o cree poder estarlo.
¿En qué consiste una sesión?
La primera visita dura alrededor de una hora y media. Se hace una Historia Clínica completa, recogiendo el motivo de consulta, antecedentes familiares y personales, hábitos fisiológicos y sintomatología acompañante. Todos estos aspectos son valorados desde el punto de vista de la Medicina Occidental y desde el punto de vista de la Medicina Tradicional China.
En esta primera visita será importante que aporte, si tiene, los informes médicos y los resultados de las pruebas diagnósticas que le hayan realizados en relación a su motivo de consulta.
Toda la información recogida permitirá una primera aproximación diagnóstica y terapéutica. Si se considera oportuno se hará una primera sesión de tratamiento de 20-30 minutos, previa firma del Documento de Consentimiento Informado. Las sesiones sucesivas suelen durar entre 30-45 minutos y se realizan con una frecuencia semanal, pudiendo variar en función de cada caso. En cada visita se valora la evolución y la respuesta al tratamiento replanteando, si es necesario, el plan terapéutico.
¿Qué se siente durante una sesión de acupuntura?
La inserción de agujas de acupuntura en la piel, no suele provocar dolor.
Las sensaciones percibidas varían bastante de unes persones a otras dependiendo de su propia susceptibilidad y del estado en que se encuentre en el momento de la puntura.
A nivel local se produce un hormigueo, pesadez o fugaz corriente eléctrica en el lugar de la puntura. Una de las cosas que más sorprende a los pacientes es la profunda relajación que experimentan durante y después la sesión de acupuntura.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
No se puede responder con exactitud a esta pregunta, pues el número de sesiones dependerá de la enfermedad a tratar, de su gravedad , tiempo de evolución, edad del paciente, enfermedades asociadas, etc..
Suelen ser necesarias 4-5 sesiones iniciales, y en función de la respuesta obtenida se podrá orientar al paciente sobre la evolución del cuadro.
En general, los trastornos que surgen de manera brusca y/o ha pasado poco tiempo desde su aparición responden antes y más satisfactoriamente.
Aquellos que han ido instaurándose de manera progresiva y/o se han cronificado, responden más lentamente.
¿Puede no funcionarme la acupuntura?
La acupuntura actúa en el organismo a diferentes niveles (sistema nervioso, endocrino, inmunitario, secreción de endorfinas, opioides y neurotransmisores, etc). Hay personas en las que la acupuntura no tiene los resultados esperados, son los llamados “malos respondedores”. Ocurre sobre todo en casos de patología dolorosa, y se debe a que el organismo produce poca cantidad de opioides endógenos y no se obtiene respuesta a los estímulos que ejerce la puntura. En estos casos se deberá evaluar la respuesta al tratamiento, valorando si es necesario otras opciones terapéuticas.